SEGURIDAD DURANTE EL DESCENSO:
Peligrosidad del río, estabilidad del río, en caso de vuelco qué hacer.
Vaya por delante que el Río Sella es un río seguro para la práctica del turismo activo. Aunque como en toda la actividad de aventura, no está exenta de algún riesgo y de cierta probabilidad de vuelco de la canoa.
Durante los 16 kilómetros de recorrido, existen varios pozos, donde es habitual ver a gente pescando, que tienen cierta profundidad, aunque la mayor parte del recorrido, la profundidad no llega al metro de altura.
Aunque el río Sella no sea un río peligroso, para realizar la actividad del Descenso Internacional del Sella, es obligatorio saber nadar. Además, el chaleco salvavidas que la empresa proporciona debe llevarse puesto durante todo el recorrido.
Durante el descenso, se van alternando las balsas de agua, de mayor profundidad y con poca corriente, con rabiones, zonas de mucha corriente y muy poca profundidad, en donde la canoa cogerá mayor velocidad sin apenar remar.
Especialmente en las zonas de rabiones debe tenerse cuidado para no chocar con otras canoas que se encuentren en el mismo punto.
Puede darse la situación que, en una zona de rabiones o tras chocar con otra canos, ésta vuelque. En este caso, lo primero que hay que hacer es mantener la calma. Como llevamos puesto el chaleco salvavidas, éste nos hará subir a la superficie del agua rápidamente.
Deberemos identificar y recoger nuestro bidón estanco para evitar que se aleje flotando de donde nos encontramos. De igual forma haremos con el remo. Tras recoger nuestras pertenencias, nos acercaremos poco a poco hacia la orilla del río, donde hacemos pie ; tras darle la vuelta a la canoa y vaciar el agua que haya quedado dentro de la misma, podemos continuar disfrutando del descenso sin mayores dificultades.